Como cualquier otro diseñador de alta costura que ha desfilado esta semana – Dior y Chanel, por nombrar a dos- María Grazia Chiuri y Pierpaolo Piccioli, los direcotres creativos de la firma, también se han inspirado en un jardín que acaba de florecer para su colección de alta costura. La delicadeza fue utilizada como la influencia que caracteriza esta colección, por sus tejidos, sus decoraciones y una silueta fluida que daba la impresión de levitar. Mientras que el blanco, el vainilla y una paleta de colores empolvados creaban una atmósfera virginal.
El look en general lo podríamos definir como “Etéreo y Angelical”. Los vestidos siguen manteniéndose sofisticados como marca de la casa, con siluetas lánguidas, delgadas, de cuellos cerrados, tímidos ayudando a estos increíbles vestidos mantener el aspecto inocente y virginal. Las prendas de abrigo daban más versatilidad, las chaquetas estructuradas esculpían la figura a la perfección, mientras que las de cuello barco daban un estilo más “cocoon” La simplicidad de los vestidos con faldas acampanadas que llegan a la rodilla o justo por debajo, creando un suave volumen, junto con un cuerpo palabra de honor dotan a la prenda de una gran feminidad. Las aplicaciones decorativas son mínimas y a tono con los tejidos delicados como la organza, los encajes, chiffon de sedas, guipurs y tules.
En cuanto a la paleta de color, los tonos crema, vainilla, los crudos fueron los que reinaban en esta pasarela llena de sutileza, aunque el rojo no podía faltar y tanto el blanco como el negro estuvieron muy presentes también.
Valentino es una colección de apuesta segura, nunca falla. Una colección que toda mujer aspira vestir alguna vez. Definitivamente las prendas están llenas de detalles delicados e inspiran esa sutileza angelical etérea, no creen?